Para Transparencia Internacional la Corrupción es “Desenfrenada” en Argentina

Argentina ocupa el puesto 105 sobre 180 países relevados para la constitución del Índice anual sobre Percepción de la Corrupción, presentado por la organización no gubernamental Transparencia Internacional (TI) el 26 de Setiembre de 2007.

El informe se refiere a la transparencia del sector público, en función de la percepción que tiene sus ciudadanos.

Según Pfeiffer Silke, directora regional para América de TI, la corrupción en la Argentina es percibida como “desenfrenada”, en base a los registros tomados por el organismo. “En ese sentido hay mucha concentración de poder en el Ejecutivo y mucho riesgo de que la función pública no se controle. Se pierden muchos fondos y recursos; hay muy poca transparencia y de ahí se genera mucho riesgo de corrupción”, explicó Silke.

Un Resumen de la Corrupción en la Argentina de los Últimos Años

El mapa de la corrupción (año 2007) muestra a Argentina entre los países más corruptos, con un 2,5 sobre 10. La puntuación se basa en encuestas realizadas a analistas y empresarios de cada país. Un puntaje menor a 5 indica “corrupción grave”, mientras que uno inferior a 3 significa “corrupción generalizada”. Así, entre los países más trasparentes se encuentran Finlandia y Dinamarca, con una puntuación de 9,4. En el otro extremo se encuentran Somalía y Myanmar, con 1,4 puntos respectivamente. En América latina, Chile es el país con mayor transparencia: ocupa el puesto 22 con 7,0 puntos.

Según la organización, uno de los aspectos más destacados del índice se refiere a que la corrupción se presenta con más frecuencia en los países pobres.

También se destaca que en los países más corruptos hay una fuerte injerencia del poder Ejecutivo sobre los demás. Así, por ejemplo, TI destaca la paradoja de una justicia manejada por políticos corruptos a la hora de juzgarlos por denuncias en su contra.

A su vez, siempre según TI, las soluciones a dicho mal deben ser afrontadas de manera global, con la colaboración de los demás países. Las recomendaciones de la organización no gubernamental son siempre las mismas: tutela de los países desarrollados, a través de la asistencia técnica en planes para combatir la corrupción en los países en vías de desarrollo.